domingo, 25 de noviembre de 2007

Mujer seas...



La amistad es un misterio y a la vez un privilegio, hay muchas maneras de hacer amigos, desde aquellos con los cuales compartes los juegos en la infancia, el colegio, o el trabajo, otras veces llegan como por azar a tu vida, y de repente se instalan en ella, por estos días gracias a las nuevas opciones tecnológicas he tenido la suerte de fundar dos nuevas amistades...
Son ellas mujeres que cada una desde su óptica luchan por los derechos de la mujer a una existencia plena, con igualdad de posibilidades ante los hombres, son las chilenas Lily y María José, la primera quiere tributar a las féminas las herramientas para el pleno conocimiento del placer sexual, la segunda las vías para enfrentar la violencia doméstica en su país.
Hablo de ellas hoy domingo 25 de noviembre por ser el Día mundial de la lucha contra la violencia femenina, y son espacios como los creados desde sus esfuerzos personales los que se necesitan generalizar en todos los rincones del mundo, para que las mujeres dejen de ser víctimas del abuso físico, sicológico y sexual al que son sometidas hoy, vergonzosamente en pleno siglo XXI.
La supresión del golpe, el grito, el abuso, dependen más de la voluntad de nosotras en no permitirlos que de la de los hombres en erradicarlas, las tres dominicanas que fueron asesinadas un día como hoy de 1960 y en cuya memoria se celebra esta fecha, deben de constituir un peremne estandarte de lucha.
Y tal vez a algunos pueda parecer un discurso ya manido, pero lo cierto es que aún millones de mujeres en nuestro planeta no tienen acceso a mínimos derechos como el control de la natalidad, los cuidados de su salud, un empleo de acuerdo a sus capacidades o la manuntención de su familia.
Eso para no referirnos a las que aún padecen por costumbres bárbaras la mutilación de sus genitales, privándolas del placer sexual y exponiéndolas a enfermedades.
Las vejaciones de la mujer no son sólo asociadas a la pobreza y al subdesarrollo también son fruto de la cobardía y el acatamiento de patrones machistas heredados por siglos de dominación masculina, nunca es tarde para dar un grito de liberación.
Hoy le agradezco a estas mujeres el esfuerzo que hacen en aras de todas sus semejantes y alabo que pongan sus talentos al servico de tan noble causa, sirvan estas palabras de incentivo para todas las que callan por verguenza su humillación y denuncien a sus verdugos.
La liberación de la mujer es mucho más que el derecho al voto, a la instrucción, o el acceso a algunos planos de la vida pública, es salirse de los patrones de la doble moral que establecen un rasero para medir las conductas de cada uno de acuerdo al sexo, es reconocer que la fortaleza no le confiere a los hombres el poder, es admitir que aunque físicamente diferentes somos emocional e intelectualmente capaces de obtener las mismas metas.
Ser mujer, debe ser una condición que este muy lejos de constituir una limitante, no puede ser un freno para el desarrollo pleno de un ente capaz, al luchar por nuestros derechos, nos ganamos la posibilidad de cada amanecer poder proclamar la dicha de SER MUJER....

Nota: Las ilustraciones pertenecen al cuaderno Tabú, Bitácora de lo prohibido, de Lily
Lara

1 comentario:

Lily Lara dijo...

Qué bello Yola, muchísimas gracias por tus palabras.

Te estimo mucho.

Cariños.